La tradición, vivida con fe entre los fieles católicos, consiste en acudir a la Iglesia durante el primer día del año para bendecir 12 velas, que luego, en oración, serán encendidas cada primer día de los 12 meses del año, como un signo de confianza en la Divina Providencia.
Los fieles manifiestan su confianza en Dios, quien dará, si es su voluntad, salud, alimento, techo y trabajo...y en el momento de nuestra muerte que no nos falte el Santismo Sacramento.
Contiene: 12 velas, 1 base, 1 Novenas a la Divina Providencia
